por Marie-Hélène Bérubé, Responsable de Programa, Igualdad de Género y Ética, Fundación Canadiense de Auditoría y Rendición de Cuentas, y Petra Schirnhofer, Directora, Unidad de Apoyo Estratégico, Iniciativa de Desarrollo de INTOSAI
Las repercusiones de la pandemia de COVID-19 afectan a todo el mundo. Debido a las desigualdades existentes desde hace tiempo, muchos efectos, como los que afectan a la salud, la economía y la esfera social, afectan con mayor dureza a las mujeres, las niñas y las poblaciones marginadas. Los primeros indicios muestran que la crisis está agravando las desigualdades existentes y socavando los avances en materia de igualdad de género y derechos de la mujer que tanto ha costado conseguir.
Las Entidades Fiscalizadoras Superiores (EFS) pueden contribuir a invertir esta tendencia. A medida que las EFS responsabilizan a los gobiernos de las respuestas nacionales a la pandemia, la aplicación de una perspectiva de género a las auditorías puede ayudar a determinar cómo se ven afectadas las mujeres, las niñas y las poblaciones marginadas, y puede dar lugar a recomendaciones fundamentadas para ayudar a mejorar los programas gubernamentales.
Este artículo examina cómo las EFS pueden desempeñar un papel positivo durante esta crisis y marcar la diferencia en la vida de todos los ciudadanos.
Por qué importa el género en tiempos de crisis
Durante una pandemia, se observan varias repercusiones sanitarias, económicas y sociales en los ciudadanos, sobre todo en las mujeres, las niñas y las poblaciones marginadas, como las personas con discapacidad, las minorías raciales y la comunidad de lesbianas, gays, bisexuales, transexuales e intersexuales.
Desde que comenzó la pandemia COVID-19, los gobiernos han observado una escalada de la violencia de género y del maltrato infantil durante los encierros; una intensificación de los niveles de ansiedad y estrés experimentados por los trabajadores de primera línea (que son predominantemente mujeres); y un aumento de los niveles de desempleo (las mujeres corren un riesgo especial, ya que ocupan la mayoría de los puestos informales y peor remunerados que carecen de seguridad laboral).
En muchos países, las repercusiones de la pandemia se suman al contexto de pobreza e inseguridad y perjudicarán aún más a las mujeres y niñas que ya sufren diferentes formas de desigualdad y discriminación.
Para contrarrestar el riesgo de que aumenten las desigualdades de género, es vital la protección y el apoyo social. Las investigaciones indican que en tiempos de crisis aumentan las probabilidades de que las niñas abandonen la escuela para realizar trabajos no remunerados en apoyo de la familia, así como los embarazos y los casos de abusos sexuales. Los estudios también muestran que el cierre de escuelas y guarderías afectará de forma desproporcionada a las mujeres, ya que la carga del trabajo no remunerado y el cuidado de la familia recae en gran medida sobre las mujeres y las niñas en muchas sociedades.
Los gobiernos pueden responder eficazmente realizando análisis basados en el género, utilizando herramientas presupuestarias de género y garantizando que las voces de las mujeres, las niñas y los grupos marginados se incluyan en los procesos de toma de decisiones. Tales acciones, que ayudan a evitar que se refuercen las normas y estereotipos de género existentes y se agraven las desigualdades, pueden convertir las respuestas a las pandemias en oportunidades que desafíen y transformen las desigualdades de género.
Cómo las EFS pueden marcar la diferencia
Mientras los gobiernos se apresuran a poner en marcha respuestas a gran escala a la crisis, las EFS, más que nunca, son baluartes de la rendición de cuentas (véase “Rendición de cuentas en tiempos de crisis“, publicado por la Iniciativa para el Desarrollo de INTOSAI). En los últimos meses, las EFS de todo el mundo se han esforzado por mantenerse resistentes y flexibles, y muchas han perfeccionado o reorientado las prioridades y los enfoques de auditoría en circunstancias difíciles (destacando la especial importancia de emplear un enfoque de auditoría basado en el riesgo). Al integrar una dimensión de género en el trabajo de auditoría, las EFS pueden ayudar a los gobiernos a garantizar que las respuestas nacionales reflejen las necesidades y las voces de las mujeres, las niñas y los grupos marginados.
Numerosas EFS han aplicado recientemente una perspectiva de género en las auditorías, especialmente en la preparación de auditorías para la implementación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). La igualdad de género y la inclusión están consagradas en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, que tiene en cuenta a todos los segmentos de la sociedad independientemente de su raza, sexo, etnia e identidad.
A medida que las EFS se embarcan en la auditoría de las respuestas nacionales a la pandemia COVID-19, es igualmente importante integrar la igualdad de género y la inclusión en todo el proceso de auditoría. Esto mejora el impacto de la auditoría, ayuda a determinar si los ciudadanos están siendo asistidos de manera equitativa y ayuda a las EFS a proporcionar recomendaciones informadas para la mejora. Las consideraciones clave para las EFS incluyen:
- Planificación y análisis -Examinar si los gobiernos han realizado análisis de género en el diseño de las respuestas a la pandemia y si han investigado los distintos impactos que los compromisos pueden tener en las mujeres, las niñas y los grupos marginados.
- Toma de decisiones -Entender cómo se toman las decisiones gubernamentales, quién participa en los procesos de toma de decisiones y qué mecanismos existen para garantizar que las mujeres, las niñas y los grupos marginados estén bien representados.
- Cumplimiento legal y normativo -Evaluar en qué medida las nuevas medidas y programas gubernamentales se adhieren a los derechos humanos y de la mujer y cumplen las leyes y normativas vigentes sobre igualdad de género, que incluyen muchos ámbitos, como la violencia doméstica y de género, el acoso sexual, las normas laborales y la atención sanitaria.
- Seguimiento y evaluación -Determinar si (y en qué medida) los gobiernos recopilan datos desglosados sobre la accesibilidad de los ciudadanos a los programas de apoyo y si los datos se utilizan para supervisar los diferentes resultados para los distintos grupos.
Estas consideraciones clave permiten a las EFS formular preguntas al auditar las respuestas nacionales a la pandemia COVID-19, tales como:
Protección social y paquetes de estímulo económico
- ¿Las transferencias de efectivo, otras medidas de protección social y los paquetes de estímulo económico llegan de forma eficiente y eficaz a los grupos destinatarios?
- ¿Proporcionan los gobiernos ayuda económica a los grupos marginados que trabajan en sectores que carecen de disposiciones en materia de seguro sanitario y protección social?
- ¿Cómo apoyan los gobiernos a los padres -principalmente mujeres y familias monoparentales- cuyo trabajo es en gran medida no remunerado?
Sistemas y programas sanitarios
- Dado que los informes de la Organización Mundial de la Salud indican que los hombres tienen más probabilidades de morir a causa del virus COVID-19 y que las mujeres representan alrededor del 70% de los trabajadores sanitarios y sociales del mundo, ¿cómo están respondiendo los gobiernos a las necesidades específicas de cada género?
- ¿Cómo apoyan los gobiernos otros servicios críticos, como el acceso a la atención materna y de salud mental?
Violencia de género
- Reconociendo los elevados niveles de violencia doméstica y de género durante los encierros, ¿cómo abordan los gobiernos la prevención, así como la aplicación y el apoyo de medidas de gestión de riesgos?
- ¿Proporcionan los gobiernos servicios (líneas de ayuda, refugios, programas de salud mental) que atiendan todas las necesidades de los ciudadanos?
La realización de auditorías que incorporen la perspectiva de género permite acceder a datos desglosados por sexo, edad, ubicación y otras categorías. Esta información ayuda a subsanar las lagunas de datos y a instar a los gobiernos a recopilar más estadísticas para fundamentar mejor el trabajo futuro.
El acercamiento de las EFS a las partes interesadas relevantes (como gobiernos, socios para el desarrollo, organizaciones de la sociedad civil y grupos que trabajan en cuestiones de género, derechos de la mujer e inclusión) es esencial para aplicar una lente de género en cualquier auditoría. El diálogo activo ayuda a comprender las respuestas globales, evaluar los riesgos principales y realizar un trabajo de auditoría que aporte el máximo valor posible.
Conclusión
Mientras la pandemia actual se cierne sobre el mundo con enormes repercusiones sociales y económicas globales, la rendición de cuentas y la supervisión siguen siendo cruciales.
Las EFS, a través de auditorías e informes oportunos y pertinentes, pueden influir significativamente en las respuestas nacionales a la pandemia. Sin embargo, para cambiar realmente la vida de todos los ciudadanos, integrar una perspectiva de género en el trabajo de auditoría es vital y especialmente importante en tiempos de crisis, cuando se intensifican los retos sanitarios, económicos y sociales.
La pandemia de COVID-19 es un momento desafiante para todos, que nos insta a contribuir cuando y donde podamos a la construcción de sociedades más igualitarias y resistentes para el futuro.
Contactos
Para más información sobre este artículo, póngase en contacto con Marie-Hélène Bérubé en mhberube@caaf-fcar.ca y con Petra Schirnhofer en petra.schirnhofer@idi.no.
Lecturas complementarias
Obtenga más información sobre COVID-19 y las repercusiones en materia de género en las siguientes publicaciones de ONU Mujeres (2020):
- Informe político: El impacto de Covid-19 en las mujeres
- COVID-19: Los nuevos datos sobre género y su importancia
Sobre nosotros
INICIATIVA DE DESARROLLO DE INTOSAI (IDI)
La IDI apoya a las EFS de los países en desarrollo en la mejora sostenible de su rendimiento y capacidades. En este trabajo, la IDI busca aplicar un lente de género y crear conciencia sobre la importancia de la igualdad de género dentro de la comunidad y los socios de la Organización Internacional de Entidades Fiscalizadoras Superiores (INTOSAI). La IDI, una organización basada en las necesidades, adapta los mecanismos de prestación de servicios, cuando es necesario, para ser más eficaz durante las crisis y ya ha aumentado la oferta de aprendizaje electrónico y las oportunidades de participación digital. La IDI cuenta con una función dedicada a las cuestiones de género y reafirmó su firme compromiso de aplicar una perspectiva de género en sus próximos trabajos.
El proyecto piloto de la IDI sobre la auditoría de la violencia de pareja contra las mujeres, vinculado a la meta 5.2 de los ODS, incorporará datos y lecciones aprendidas de la pandemia COVID-19. La IDI también tiene previsto realizar una auditoría cooperativa de los sistemas de salud -vinculada a la meta 3D de los ODS, “Fortalecer la capacidad de todos los países, en particular de los países en desarrollo, para la alerta temprana, la reducción de riesgos y la gestión de los riesgos sanitarios nacionales y mundiales”- en la que las consideraciones de género e inclusión se integrarán y visualizarán como parte del impacto de la auditoría. Ambas auditorías utilizarán el Modelo de Auditoría de los ODS(ISAM) de la IDI.
La cooperación y la colaboración son clave, e IDI hace un llamamiento a todas las EFS y socios para que trabajen juntos y ayuden a avanzar en los logros sobre igualdad de género que tanto ha costado conseguir.
FUNDACIÓN CANADIENSE DE AUDITORÍA Y RENDICIÓN DE CUENTAS (CAAF)
El CAAF es una organización sin ánimo de lucro dedicada a promover y reforzar la auditoría de gestión, la supervisión y la rendición de cuentas del sector público en Canadá y en el extranjero a través de la investigación, la educación y el intercambio de conocimientos.
A través de su programa internacional, financiado por el Gobierno de Canadá, el CAAF ayuda a las EFS a crear capacidades de auditoría de rendimiento, centrándose en la auditoría de la igualdad de género y los ODS. El CAAF ha desarrollado varios recursos relacionados, incluida la “Guía práctica para auditar los ODS: igualdad de género” y un curso sobre “Auditoría de la igualdad de género”. El CAAF también está empezando a trabajar en la integración de la perspectiva de género con el objetivo de fomentar la igualdad de género y la capacitación de las mujeres en las EFS asociadas.
A lo largo de esta pandemia, el CAAF se ha ido adaptando a nuevas formas de trabajar y ha explorado formas innovadoras de proporcionar valor a sus miembros y socios, lo que incluye una serie de seminarios web lanzados en abril, un repositorio de recursos COVID-19 para auditores y comités de supervisión, y próximas ofertas de formación en línea. Más información en www.caaf-fcar.ca.
