Por Bujar Leskaj, Presidente de ALSAI, y Rinald Muça, antiguo Director General de ALSAI
Albania se encuentra en una posición geográfica favorable para servir como centro de comercio, destino turístico y proveedor de servicios financieros y de otra índole. El creciente uso de la tecnología en la industria, las infraestructuras y las comunicaciones podría dar al país una ventaja competitiva en estos campos.
No obstante, Albania aún dista mucho de utilizar la tecnología con eficacia. En los últimos años, la Entidad Fiscalizadora Superior (EFS) de Albania ha llevado a cabo auditorías de rendimiento y de tecnologías de la información (TI) del sector público – cuya actividad representa alrededor del 30 por ciento del producto interior bruto (PIB) anual del país – y ha comprobado que no se ha prestado la suficiente atención a la tecnología.
Instituciones clave como la Dirección General de Hacienda, la Agencia Nacional de Protección Civil, el Instituto de Geociencias, Energía, Agua y Medio Ambiente y la Autoridad de Comunicaciones Electrónicas y Postales (AKEP) carecen de estrategias y planes de acción para desarrollar e implementar nuevas tecnologías de la información. La auditoría de la EFS sobre el uso de Internet en la administración pública detectó una falta de procedimientos para gestionar los incidentes en las plataformas informáticas y sus redes; un uso inadecuado del tráfico web; y una falta de control sobre los usuarios, lo que aumenta el riesgo de filtraciones de datos.
Actualmente, apenas se recurre a la tecnología moderna en el sector privado, dedicado principalmente a la agricultura, la pesca, el comercio, el transporte, los servicios de hostelería y alimentación, así como a la construcción y la industria FASON (industrias de transformación textil, confección y fabricación de calzado). Las actividades que requieren el uso de tecnologías más avanzadas, como el tratamiento de la información y las comunicaciones, los servicios financieros y de seguridad o la investigación, representan tan solo entre el 10% y el 12% del PIB.
Pero, aunque los albaneses prácticamente no utilicen la tecnología con fines empresariales, sí lo hacen profusamente con fines de entretenimiento, información y comunicación. Así, por ejemplo, el número de usuarios activos de servicios móviles en 2018 fue de unos 2,7 millones (de una población total de 2,85 millones), lo que generó unos 6.000 millones de minutos al año, una cifra que sigue creciendo.
La transición de la infraestructura móvil desde la red 4G a la 5G representa una oportunidad para reorganizar toda la economía – no solo el consumo – en torno a las tecnologías. La tecnología 5G promete inteligencia artificial, medios autónomos de transporte civil y militar, ciudades inteligentes, en la que los semáforos se activan en función del tráfico, y hospitales donde las intervenciones quirúrgicas las realiza un robot dirigido por un médico a 10.000 km de distancia.
No obstante, esta tecnología no solo comporta prosperidad, sino también riesgos para la seguridad. Basándose en una auditoría de rendimiento que realizó de AKEP, la EFS de Albania recomendó:
- Que AKEP llevara a cabo un análisis preliminar del impacto que la implantación de la tecnología 5G tendría en el país. La implementación se debe desarrollar en base a un plan de acción nacional claro y exhaustivo, como protección contra los riesgos de seguridad.
- Que el Gobierno estableciera un Comité Nacional para la evaluación de las inversiones estratégicas en Albania, incluidas las inversiones en tecnología 5G. Este comité debería incluir expertos no solo en economía, sino también en seguridad, TI y defensa. Para ello, el Parlamento tendrá que aprobar un fundamento jurídico especial. Entre otras tareas, este comité debería determinar si:
- Los proveedores de tecnología 5G son controlados por un gobierno extranjero, sin proceso judicial independiente.
- Los proveedores de redes y de servicios se financian de forma transparente y aplican las mejores prácticas en materia de adquisiciones, inversiones y contratación.
- Los proveedores de servicios tienen estructuras de propiedad, asociación y gobernanza corporativa transparentes.
- Los proveedores son innovadores y respetan la legislación y los derechos de propiedad intelectual.
- Los proveedores y las tecnologías de red crean un entorno seguro, independiente de la influencia gubernamental y cumplen las normas del sector.
El Presidente y el Director General de la EFS de Albania presentaron los hallazgos y las recomendaciones de la auditoría en la Cumbre sobre Ciberseguridad organizada por el Senado de EE.UU. el 03.02.2020.