Liderar en una crisis: Los jóvenes líderes de la EFS comparten sus experiencias en COVID-19

La verdadera prueba de liderazgo es lo bien que se funciona en una crisis.

Brian Tracy, conferenciante motivacional

El liderazgo es un motor clave del cambio, el crecimiento y el rendimiento de las Entidades Fiscalizadoras Superiores (EFS). En 2015, la Iniciativa de Desarrollo de la INTOSAI (IDI) lanzó el programa Jóvenes Líderes de las EFS (SYL) para nutrir a los jóvenes líderes y permitir el crecimiento individual y las contribuciones al desarrollo de las EFS. La segunda cohorte SYL se reunió en 2018, y 21 jóvenes líderes que representan a todas las regiones de la INTOSAI han permanecido en este viaje IDI SYL.

El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo considera la pandemia de COVID-19 la “crisis sanitaria mundial definitoria de nuestro tiempo y el mayor reto al que nos hemos enfrentado desde la Segunda Guerra Mundial”. Las EFS, a la luz de la nueva normalidad del trabajo a distancia y de las políticas de trabajo más flexibles, dependerán en gran medida de la capacidad de adaptación del liderazgo para gestionar esta crisis.

Para comprender mejor las repercusiones de la pandemia en el liderazgo, los Jóvenes Líderes de IDI SAI comparten sus puntos de vista y experiencias personales sobre los estilos de liderazgo, la implicación eficaz de los equipos y las cualidades que se consideran necesarias para sortear la crisis sanitaria mundial.

Aunque geográficamente dispersos, surgieron temas comunes, como el uso de estilos de liderazgo similares durante la crisis: centrarse en la empatía hacia los miembros del equipo en un esfuerzo por crear entornos de trabajo más seguros y de mayor confianza, y reconocer que la comunicación clara y frecuente y la flexibilidad siguen siendo componentes críticos para demostrar el compromiso. Los Jóvenes Líderes de SAI creen que el verdadero liderazgo significa esforzarse por ser mejores en todos los ámbitos de la vida, profesional y personalmente, y aspiran a capacitar a quienes les rodean.

Esto ha sido un reto emocional para mí; sin embargo, la experiencia me ha enseñado a minimizar la presión que me impongo y a afrontar los retos de cada día según van surgiendo.

Malebogo Sanah Mogapi, EFS Botsuana
Malebogo Sanah Mogapi, EFS Botsuana

¿Cómo ha afectado la nueva normalidad a los estilos de liderazgo en las organizaciones, incluidas las EFS?
La pandemia ha afectado significativamente a las operaciones de la EFS de Botsuana. La dirección pospuso la aplicación del plan operativo debido al cierre patronal de abril a mediados de mayo de 2020, y para reducir el número de personas en las oficinas, la organización ha puesto en marcha medidas de flexibilidad, como el teletrabajo, el trabajo a turnos y la reducción de jornada. Debido a las restricciones de las reuniones en persona, los directivos se han mostrado más receptivos a los eventos virtuales. La empatía ha aumentado y algunos plazos se han relajado a medida que la organización aprende a lidiar con la nueva normalidad.

¿Cómo han afectado los cambios a su capacidad para dirigir eficazmente y hacer participar a sus equipos en esta crisis?
Toda la experiencia ha sido un reto y, con varios funcionarios trabajando por turnos, ha resultado difícil coordinar los esfuerzos de los equipos de proyecto y auditoría. Hay mucha ansiedad entre los funcionarios, lo que provoca empatía y motivación. Planificar y realizar las tareas con eficacia ha sido difícil debido a los frecuentes cierres, así que hacemos lo que podemos con el tiempo de que disponemos. Hay muchas incertidumbres en torno a la pandemia. Como tal, esto ha sido un reto emocional para mí; sin embargo, la experiencia me ha enseñado a minimizar la presión que me impongo y a afrontar los retos de cada día según van surgiendo.

¿Qué cualidades cree que necesitará un líder para superar esta crisis sanitaria mundial?
Para ser un buen líder en esta crisis, la adaptabilidad y tener una mente abierta son fundamentales: escuchar y aprender de la gente que te rodea y estar dispuesto a probar cosas nuevas. La empatía también es esencial: ayudar a los demás en la transición a la nueva normalidad y estar en contacto con los miembros del equipo en la medida de lo posible. La integridad sigue siendo primordial, sobre todo porque nos encontramos trabajando con un mayor grado de independencia durante la crisis.

Un buen líder, un líder fuerte, crea un ambiente de trabajo positivo, optimista y motivador.

Sue Su, EFS China
Sue Su, EFS China

¿Cómo ha influido la nueva normalidad en los estilos de liderazgo de las organizaciones, incluidas las EFS?
La comunicación sigue siendo el impacto más evidente, cada vez más electrónica e indirecta. Antes de la pandemia, el trabajo solía desencadenarse por una visita a la oficina. Ahora, ocurre mediante un mensaje de correo electrónico que espera la respuesta de los miembros del equipo, y este desfase ha alterado el ritmo operativo del equipo. Esta nueva normalidad exige un estilo de liderazgo “previsor”, que impulse a los líderes a tener planes predeterminados y meditados antes de asignar el trabajo. Dado que los colegas ubicados en otras provincias y ciudades (fuera de la sede central de la EFS China en Pekín) no pueden regresar físicamente, se facilitaron por adelantado varios planes de trabajo de auditoría que contenían orientaciones detalladas, metodologías y conjuntos de herramientas.

¿Cómo han afectado los cambios a su capacidad para dirigir eficazmente y hacer participar a sus equipos en esta crisis?
Aunque ya era un líder racional y tranquilo, la crisis me ha hecho darme cuenta de lo importante que es ser cariñoso, comprensivo y solidario. La unión emocional es la base de un equipo fuerte, y la pandemia de COVID-19 me ha demostrado que, como líder, está bien proporcionar apoyo emocional a los miembros del equipo. Al compartir experiencias e historias ocurridas durante la crisis, los miembros de mi equipo y yo nos hemos comprendido mejor los unos a los otros. También se siente mejor ser un líder que realmente se preocupa por las personas que están detrás del trabajo.

¿Qué cualidades cree que necesitará un líder para superar esta crisis sanitaria mundial?
Hay un viejo dicho popular en China: “Espera lo mejor y prepárate para lo peor”. La esperanza se atesora durante una crisis, y un buen líder -un líder fuerte- construye una atmósfera positiva en el lugar de trabajo, optimista y motivadora. La pandemia de COVID-19 es un reto mundial sin precedentes y de alto riesgo. Por ello, los líderes deben tratar de reducir el pánico y la incertidumbre compartiendo conocimientos y tomando las medidas adecuadas para resolver los problemas a medida que surjan. Es un momento difícil para todos en el mundo en este momento. Hay dolor y tristeza en los corazones de tanta gente. Tenemos que estar unidos y ser compasivos, y dedicar tiempo a ayudarnos unos a otros para convertirnos en un solo mundo, una sola familia.

Aceptar nuevas circunstancias, como las que estamos viviendo durante la pandemia COVID-19, nos ayudará a comprender mejor las situaciones inesperadas, así como las acciones y reacciones de aquellos con quienes trabajamos.

Erick Alvarado Muñoz, EFS Costa Rica
Erick Alvarado Muñoz, EFS Costa Rica

¿Cómo ha afectado la nueva normalidad a los estilos de liderazgo en las organizaciones, incluidas las EFS?
Debemos comprender que los estilos de liderazgo pueden afectar a la calidad de la vida laboral y familiar y pueden utilizarse como una poderosa herramienta para navegar en esta nueva era en la que el cambio y la volatilidad siguen acelerándose e intensificándose. El papel del liderazgo es hoy más importante y más difícil, ya que la nueva normalidad aún no está definida y los estilos de liderazgo deben adaptarse a las nuevas circunstancias y necesidades.

¿Cómo han afectado los cambios a su capacidad para dirigir eficazmente y hacer participar a sus equipos en esta crisis?
El liderazgo, el nivel de trabajo en equipo y el rendimiento de los proyectos están muy correlacionados: todo depende de las relaciones, las conversaciones y las interacciones con las personas. Esta era de cambios constantes hace más difícil comunicar las ideas adecuadamente debido a la falta de comunicación no verbal, un aspecto importante que ofrece contexto a las tareas y actividades. Por ejemplo, en una reunión celebrada físicamente en la oficina, puedo ver los gestos y reacciones de los compañeros de equipo, algo que el entorno virtual no puede ofrecer plenamente. Esto requiere que seamos más asertivos y claros verbalmente.

¿Qué cualidades cree que necesitará un líder para superar esta crisis sanitaria mundial?
La resistencia, la adaptabilidad y la flexibilidad son las cualidades de liderazgo más importantes. Aceptar nuevas circunstancias, como las que estamos viviendo durante la pandemia COVID-19, nos ayudará a comprender mejor las situaciones inesperadas, así como las acciones y reacciones de aquellos con quienes trabajamos. Los líderes deben tratar de reforzar y aplicar la inteligencia emocional, la empatía y las habilidades de gestión social. Además, mejorar las competencias comunicativas puede ayudar a los líderes a clarificar sus mensajes e influir en los demás.

Un liderazgo eficaz es esencial en los momentos críticos, especialmente en una crisis prolongada, como la pandemia de COVID-19. Un liderazgo sólido es clave, ya que un liderazgo fragmentado conduce a organizaciones fragmentadas.

Abdourahman Badjie, EFS Gambia
Abdourahman Badjie, EFS Gambia

¿Cómo ha influido la nueva normalidad en los estilos de liderazgo de las organizaciones, incluidas las EFS?
La pandemia de COVID-19 nos ayudó a ajustar los estilos de comunicación, dándonos cuenta de que la comunicación frecuente puede mejorar el entendimiento. La crisis también ha reforzado los lazos del equipo y ha ilustrado la importancia de velar por su bienestar.

¿Cómo han afectado los cambios a su capacidad para dirigir eficazmente y hacer participar a sus equipos en esta crisis?
¡Mi equipo me necesita ahora más que nunca! Mantenerse fuerte es mantenerlos fuertes. Intento predicar con el ejemplo y delegar para dar más poder a los demás. La capacitación proporciona energía para actuar y desviar la atención de los impactos negativos de la pandemia. Durante la crisis, recuerdo a mi equipo que siga las directrices de salud y seguridad, así como el trabajo en curso. Preocuparse demasiado por la pandemia de COVID-19 es agotador, y poco podemos hacer al respecto. La unidad del equipo es vital para facilitar la concentración en lo que realmente importa, personal y profesionalmente.

¿Qué cualidades cree que necesitará un líder para superar esta crisis sanitaria mundial?
Un liderazgo eficaz es esencial en los momentos críticos, especialmente en una crisis prolongada, como la pandemia COVID-19. Un liderazgo fuerte es clave, ya que un liderazgo fragmentado conduce a organizaciones fragmentadas. Es importante tener en cuenta que una crisis es temporal.

Más que nunca, los líderes deben demostrar y generar mayor empatía, apoyo y ánimo para motivar al personal y permitirnos crecer juntos a través de la adversidad.

Kelisha Salmon, EFS Jamaica
Kelisha Salmon, EFS Jamaica

¿Cómo ha influido la nueva normalidad en los estilos de liderazgo de las organizaciones, incluidas las EFS?
La pandemia de COVID-19 ha contribuido sin duda a los cambios. SAI Jamaica se beneficia ahora de un modelo de trabajo mixto que ofrece a los empleados la flexibilidad de trabajar en la oficina y desde casa. Al inicio del brote en Jamaica, la dirección adoptó un enfoque centrado en las personas, demostrando compasión al tiempo que garantizaba la productividad continuada en medio de los nuevos retos, lo que incluía dar prioridad a la seguridad de los empleados, comunicar con frecuencia y aplicar medidas de prevención para combatir la propagación del virus.

¿Cómo han afectado los cambios a su capacidad para dirigir eficazmente y hacer participar a sus equipos en esta crisis?
Los limitados sistemas e infraestructuras informáticos plantearon grandes retos a la hora de cumplir los hitos; sin embargo, también impulsaron la conexión y el compromiso de nuevas formas. Dadas las realidades del trabajo a distancia, aprendí a gestionar mis expectativas y a aumentar la flexibilidad de los plazos para reducir el estrés innecesario que perturbaría aún más el equilibrio entre la vida laboral y personal. Al establecer nuevas prioridades y delegar más, la atención se centró en actividades que generaron ganancias a corto plazo para el equipo, lo que ayudó a generar confianza y a aumentar la dependencia mutua.

¿Qué cualidades cree que necesitará un líder para superar esta crisis sanitaria mundial?
La pandemia de COVID-19 es una crisis sin precedentes que produce una gran incertidumbre, miedo y ansiedad. Más que nunca, los líderes deben demostrar y generar mayor empatía, apoyo y ánimo para motivar al personal y permitirnos crecer juntos a través de la adversidad. La creatividad a la hora de identificar y aprovechar oportunidades emergentes que minimicen las pérdidas económicas y mitiguen los retos que surjan es imperativa. El distanciamiento social y las flexibilidades en el lugar de trabajo exigen que los líderes generen una mayor confianza con todas las partes interesadas, al tiempo que garantizan el equilibrio entre la vida laboral y personal de los empleados.

Las circunstancias exigen revisar los planes y encontrar formas creativas de entrenar, trabajar y colaborar a distancia. Como equipo, hemos encontrado la manera de superar cada problema y mejorar en cada oportunidad.

Nicaria O. Stewart, EFS Jamaica
Nicaria O. Stewart, EFS Jamaica

¿Cómo ha influido la nueva normalidad en los estilos de liderazgo de las organizaciones, incluidas las EFS?
Este momento extraordinario y sin precedentes exige adaptarse a un estilo de liderazgo más flexible. Nos obliga a mejorar y gestionar mejor las relaciones con nuestros colegas y clientes dispersos. También significa ser más reflexivo a la hora de cambiar las prioridades operativas críticas, al tiempo que se reconocen las crecientes expectativas de todas las partes interesadas. A medida que los miembros del equipo experimentan ansiedad, incertidumbre y miedo durante la pandemia, los líderes deben tratar de ser más empáticos e inspiradores, creando un equilibrio de comunicación para construir interacciones positivas que permitan a los miembros del equipo sentirse conectados mientras trabajan a distancia.

¿Cómo han afectado los cambios a su capacidad para dirigir eficazmente y hacer participar a sus equipos en esta crisis?
El principal cambio consiste en dirigir equipos a través del trabajo a distancia conciliando la vida familiar, y hacerlo de forma significativa. En la búsqueda de la conciliación de la vida laboral y familiar, a veces pueden producirse retrasos en la comunicación, sobre todo cuando se producen interrupciones puntuales en el apoyo a las infraestructuras y prevalecen las exigencias familiares. Sin embargo, reconocer que muchos miembros del equipo están preocupados por las circunstancias individuales fomenta la empatía y el apoyo emocional a través de un compromiso más frecuente. Las circunstancias actuales exigen revisar los planes y encontrar formas creativas de entrenar, trabajar y colaborar a distancia. Como equipo, hemos encontrado la manera de superar cada problema y mejorar en cada oportunidad.

¿Qué cualidades cree que necesitará un líder para superar esta crisis sanitaria mundial?
Los líderes tendrán que seguir creando equipos ganadores independientemente del espacio físico de trabajo. Esto requerirá que los líderes refuercen la inteligencia emocional, volviéndose más empáticos e inspiradores. Los líderes deben ser honestos, serenos y racionales, respondiendo a las necesidades de los miembros del equipo en el momento. El liderazgo eficaz también requiere flexibilidad, adaptando los estilos de liderazgo a las necesidades del equipo o de la situación. Los líderes capaces de fomentar una comunicación abierta crearán vínculos más fuertes y mejorarán las relaciones con los miembros del equipo, lo que redundará en un mayor éxito.

Me comunico con frecuencia, transmito mensajes claros, establezco prioridades y tomo decisiones con convicción. Como equipo, nos sentimos dueños de nuestros objetivos con el objetivo de alcanzar el éxito.

Qendresa Mulaj, EFS Kosovo
Qendresa Mulaj, EFS Kosovo

¿Cómo ha afectado la nueva normalidad a los estilos de liderazgo en las organizaciones, incluidas las EFS?
De repente nos enfrentamos a una crisis mundial que amenaza a los más vulnerables, así como a nuestros seres queridos, y las nuevas circunstancias nos han afectado directamente a nivel profesional y personal. Las organizaciones, incluidas las EFS, deben adaptarse a la nueva normalidad y encontrar formas alternativas de operar. Es muy importante que los líderes se centren en las personas y las relaciones y, al mismo tiempo, aborden los procesos, las tareas y los resultados para cumplir los objetivos y los plazos. El desarrollo de un liderazgo transformador en nuestra EFS nos ayudó a equilibrar la atención y la motivación de los empleados para superar las dificultades y tener éxito en sus responsabilidades laborales.

¿Cómo han afectado los cambios a su capacidad para dirigir eficazmente y hacer participar a sus equipos en esta crisis?
Mantener al equipo centrado y comprometido, lo que puede repercutir en la consecución de los resultados previstos, ha sido muy difícil durante la pandemia. La situación sigue siendo muy impredecible, así que me comunico con frecuencia, transmito mensajes claros, establezco prioridades y tomo decisiones con convicción. Como equipo, nos sentimos dueños de nuestros objetivos con el objetivo de alcanzar el éxito.

¿Qué cualidades cree que necesitará un líder para superar esta crisis sanitaria mundial?

  • Comunicación;
  • Confianza;
  • Compasión; y
  • Colaboración.

Superar esta crisis sanitaria mundial exige que seamos más comprensivos y comprensivas con las necesidades de los demás, ya que ahora atendemos simultáneamente nuestras necesidades personales y profesionales.

Mohd Nazim Mat Siam, EFS Malasia
Mohd Nazim Mat Siam, EFS Malasia

¿Cómo ha influido la nueva normalidad en los estilos de liderazgo de las organizaciones, incluidas las EFS?
Durante la nueva normalidad, un enfoque de liderazgo participativo-democrático puede ser más beneficioso a la hora de realizar el trabajo de auditoría, teniendo en cuenta que el personal puede enfrentarse a una amplia gama de situaciones en la realización del trabajo de auditoría. Es poco probable que los métodos convencionales, como el examen físico de los documentos, sean eficaces durante la pandemia COVID-19, ya que el trabajo se realiza principalmente desde casa. Los líderes tendrán que ser más flexibles, coordinando las reuniones en distintos plazos, posponiendo las visitas físicas y recurriendo a las comunicaciones virtuales.

¿Cómo han afectado los cambios a su capacidad para dirigir eficazmente y hacer participar a sus equipos en esta crisis?
La falta de contacto físico y de supervisión repercute en la eficacia del trabajo de auditoría, sobre todo debido al tiempo de transición necesario para que los equipos se adapten a la nueva normalidad y se ajusten a las nuevas rutinas. El trabajo se ha mezclado con las actividades de la vida diaria, lo que ha provocado la necesidad de alternar métodos y horarios de trabajo.

¿Qué cualidades cree que necesitará un líder para superar esta crisis sanitaria mundial?
Superar esta crisis sanitaria mundial exige que seamos más comprensivos y comprensivas con los demás, ya que nos encontramos atendiendo necesidades personales y profesionales simultáneamente. La adaptabilidad es esencial: tener la capacidad de ajustarse rápidamente a las nuevas circunstancias, incluido el uso cada vez mayor de la comunicación virtual, la aceptación electrónica de informes y documentos de trabajo y la flexibilidad en los horarios de trabajo.

La pandemia ha traído incertidumbre para el futuro, y los líderes pueden ayudar a aliviar la duda y la ansiedad mostrando una actitud positiva, comunicando con claridad y dando ejemplo a la hora de abrazar el cambio.

Huda Said Al Wahaibi, EFS de Omán
Huda Said Al Wahaibi, EFS de Omán

¿Cómo ha afectado la nueva normalidad a los estilos de liderazgo en las organizaciones, incluidas las EFS?
La pandemia de COVID-19 ha afectado a todos, individuos y organizaciones. Las nuevas circunstancias globales han forzado cambios en los estilos de liderazgo, que evolucionan para afrontar mejor los impactos en los miembros del equipo y los requisitos del trabajo. Las organizaciones, incluidas las EFS, han adoptado más plenamente la comunicación electrónica y el trabajo a distancia, lo que ha supuesto un reto para aquellas que carecen de la infraestructura y los recursos adecuados.

¿Cómo han afectado los cambios a su capacidad para dirigir eficazmente y hacer participar a sus equipos en esta crisis?
En Omán, la crisis comenzó a mediados de febrero de 2020, y empezamos a trabajar desde casa a mediados de marzo de 2020. Se ultimaron los planes de auditoría y se distribuyó el alcance del trabajo entre los miembros del equipo. Las reuniones virtuales sustituyeron al contacto cara a cara. El trabajo y los procesos de auditoría, basados en plazos previamente establecidos, se centraron más en la consecución de tareas y objetivos. La pandemia COVID-19 nos ha proporcionado valiosas lecciones de aprendizaje en materia de liderazgo, a medida que nos adaptamos a las nuevas exigencias profesionales y personales.

¿Qué cualidades cree que necesitará un líder para superar esta crisis sanitaria mundial?
La crisis sanitaria mundial exige que los líderes adopten nuevas cualidades, una de las cuales es la voluntad de cambio. La pandemia ha traído incertidumbre para el futuro, y los líderes pueden ayudar a aliviar la duda y la ansiedad mostrando una actitud positiva, comunicando con claridad y dando ejemplo a la hora de abrazar el cambio.

Los esfuerzos por dar prioridad a la gestión descentralizada y al compromiso suponen un cambio que exige flexibilidad y aptitudes avanzadas de liderazgo virtual.

Raymond Veratau, EFS Papúa Nueva Guinea
Raymond Veratau, EFS Papúa Nueva Guinea

¿Cómo ha influido la nueva normalidad en los estilos de liderazgo de las organizaciones, incluidas las EFS?
La nueva normalidad limita la calidad de la comunicación, el compromiso, la delegación, la capacitación y, lo que es más importante, la visión y el propósito. La respuesta general a la crisis está empujando a las organizaciones y a las EFS más hacia el comercio electrónico como medio para sobrevivir mientras gestionan las funciones encomendadas. Los líderes están aprovechando las oportunidades de alcance creativo a pesar de la mayor complejidad y desorientación, y los esfuerzos por dar prioridad a esta gestión y compromiso descentralizados suponen un cambio que exige flexibilidad y aptitudes avanzadas de liderazgo virtual.

¿Cómo han afectado los cambios a su capacidad para dirigir eficazmente y hacer participar a sus equipos en esta crisis?
Gestionar el riesgo operativo en una situación de crisis es todo un reto, ya que resulta difícil equilibrar el cumplimiento de las responsabilidades encomendadas con la adhesión a las directivas legales y la empatía con las partes interesadas perjudicadas por la pandemia. Estos cambios limitan el liderazgo y reducen el nivel y la regularidad de la comunicación, lo que da pie al pánico, la confusión y la toma de decisiones indecisas.

¿Qué cualidades cree que necesitará un líder para superar esta crisis sanitaria mundial?
La nueva normalidad ofrece a los líderes oportunidades para redefinir el propósito y el significado y reconstruir la gobernanza personal. En la gestión de crisis, la buena intuición y la toma de decisiones desde una perspectiva moral, al tiempo que se gestiona la angustia, son vitales, sobre todo para construir relaciones significativas. El compromiso y la pasión reafirman las convicciones, y los líderes fuertes pueden infundir creatividad e innovación a la hora de difundir estrategias y alcanzar objetivos. Como la nueva normalidad restringe el contacto personal, los líderes necesitarán enfoques más creativos que aprovechen la tecnología. La comunicación regular, clara, exhaustiva y rápida es importante, y capacitar a los demás y delegar eficazmente puede mejorar el liderazgo, especialmente en una situación de crisis.

Los grandes líderes saben adaptarse a distintas situaciones, entienden cómo enfocar los problemas desde distintas perspectivas y están dispuestos a pedir consejo a los demás.

Mounira Snoussi, EFS Túnez
Mounira Snoussi, EFS Túnez

¿Cómo ha afectado la nueva normalidad a los estilos de liderazgo en las organizaciones, incluidas las EFS?
La pandemia de COVID-19 ha afectado brutalmente a las organizaciones, tanto desde el punto de vista financiero como operativo. Las organizaciones, incluidas las EFS, han tenido que aplicar procedimientos preventivos para proteger al personal, y ahora se confía más en el control de documentos. Los dirigentes se han visto obligados a tomar decisiones sobre nuevos métodos de trabajo y flexibilidades en el lugar de trabajo. La pandemia también impulsó a las EFS a actualizar sus actividades y añadir auditorías relacionadas con la crisis. Estas decisiones, aunque difíciles, refuerzan la posición de las EFS como instituciones útiles, activas y eficaces al servicio de los ciudadanos. Las EFS tienen una oportunidad pionera: poner en marcha iniciativas creativas que fortalezcan las relaciones con las partes interesadas.

¿Cómo han afectado los cambios a su capacidad para dirigir eficazmente y hacer participar a sus equipos en esta crisis?
La adopción de prácticas de trabajo a distancia puede plantear problemas a la hora de mantener el compromiso del equipo y un liderazgo situacional adecuado. Los líderes pueden apoyar a los equipos garantizando la disponibilidad del hardware y el software necesarios para realizar el trabajo con eficacia. La empatía también es muy importante para garantizar la implicación y la confianza del equipo. Es esencial debatir en detalle los programas anuales y fomentar la participación en actos que refuercen las competencias y el desarrollo de capacidades.

¿Qué cualidades cree que necesitará un líder para superar esta crisis sanitaria mundial?
Es crucial que los líderes se comuniquen de forma clara, concisa y oportuna y apliquen la empatía para inspirar a los demás y fomentar el trabajo en equipo. Sigue siendo fundamental saber gestionar las relaciones, así como saber motivar a las personas manteniendo el autocontrol. Los líderes, encargados de gestionar a los demás, deben asegurarse de que el equipo permanece unido. La flexibilidad intelectual es clave, ya que permite a los líderes evitar el estrés, el pánico y el exceso de trabajo, lo que conduce a decisiones más racionales y seguras en un entorno incierto. A todos nos encanta que las cosas salgan exactamente como las planeamos. Los grandes líderes saben adaptarse a distintas situaciones, entienden cómo enfocar los problemas desde distintas perspectivas y están dispuestos a pedir consejo a los demás. Un líder que piensa de forma creativa acepta los retos e involucra a todas las partes interesadas.

Una buena toma de decisiones es más crucial que nunca, y exige que los líderes piensen críticamente, consulten con expertos y planifiquen ampliamente antes de actuar.

Emine Ersöz, EFS Turquía
Emine Ersöz, EFS Turquía

¿Cómo ha influido la nueva normalidad en los estilos de liderazgo de las organizaciones, incluidas las EFS?
Aunque aún no se ha definido la nueva normalidad para las sociedades, las economías o las organizaciones, existe la sensación de que no volveremos a la antigua normalidad a corto plazo, por lo que resulta esencial encontrar formas innovadoras y eficaces de garantizar la continuidad de las empresas. Dado que las EFS desempeñan un papel importante a la hora de exigir responsabilidades a los gobiernos, la labor de auditoría y el compromiso de las partes interesadas siguen siendo vitales. Una planificación eficaz -como la adaptación de las estrategias, planes y programas de auditoría y el uso de herramientas informáticas para facilitar la auditoría a distancia- ayudará a las EFS a alcanzar sus objetivos durante la pandemia COVID-19.

¿Cómo han afectado los cambios a su capacidad para dirigir eficazmente y hacer participar a sus equipos en esta crisis?
Desde el inicio de la pandemia, la comunicación organizativa ha supuesto un gran reto, ya que las reuniones virtuales han sustituido a la interacción cara a cara. También han surgido dificultades para dirigir e implicar a los miembros del equipo, sobre todo a la hora de definir y comunicar los requisitos del trabajo y ajustar los plazos. Esto hace que la organización, la flexibilidad y el compromiso sean competencias clave de los líderes. Durante la pandemia COVID-19, dar prioridad a los objetivos del equipo y capacitar a sus miembros me ha permitido mantener el trabajo en el buen camino. Para garantizar la conectividad del equipo, me comunico en la medida de lo posible utilizando todas las plataformas disponibles y hago hincapié en la flexibilidad para ayudar a garantizar que todas las tareas se realicen a tiempo y con alta calidad.

¿Qué cualidades cree que necesitará un líder para superar esta crisis sanitaria mundial?
Dirigentes de todo el mundo se enfrentan al dilema de mantener la seguridad de ciudadanos y empleados al tiempo que conservan la estabilidad económica y operativa. La comunicación transparente con las partes interesadas es clave para generar y mantener la confianza, lo que ayuda a evitar el pánico y la desorientación. Una buena toma de decisiones es más crucial que nunca, y exige que los líderes piensen críticamente, consulten con expertos y planifiquen ampliamente antes de actuar.

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