por Vivi Niemenmaa, Secretaria General, GTEA de INTOSAI
Cada tres años, el Grupo de Trabajo sobre Auditoría Medioambiental (GTAMA) de la INTOSAI publica un estudio sobre la situación de la auditoría medioambiental en el mundo. La encuesta ofrece una visión general de las auditorías que las Entidades Fiscalizadoras Superiores (EFS) han realizado y tienen previsto realizar, los recursos que las EFS han dedicado al trabajo, los temas que han elegido, la forma en que han llevado a cabo sus auditorías y han comunicado acerca de ellas, y los principales obstáculos a su trabajo.
La 10ª encuesta del GTAMA, a la que respondieron 71 EFS, indica un aumento continuo tanto del volumen de auditorías medioambientales como del número de empleados que trabajan en ellas, especialmente entre los encuestados de la Organización Africana de EFS (AFROSAI) y la Asociación de EFS del Pacífico (PASAI). En la mayoría de los casos, los encuestados realizaron auditorías medioambientales en el contexto de auditorías de resultados, y casi todos afirmaron que sus auditores medioambientales tenían experiencia en auditorías de resultados.
Los temas climáticos y los ODS reciben cada vez más atención
Mientras que el tema de auditoría más popular en 2018-2020 fue la protección de la naturaleza, en 2021-2023 la adaptación al cambio climático ha ascendido al primer puesto. El hecho de que la adaptación al cambio climático ni siquiera figurara en la lista de las diez primeras en la encuesta anterior podría ser un indicio de que las EFS están cada vez más atentas a esta cuestión.
Aunque la mayoría de las EFS encuestadas no han auditado acuerdos medioambientales multilaterales, existe un interés creciente en este ámbito, especialmente en la auditoría del Acuerdo de París sobre el clima, seguido de la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas (ONU). Además, la Agenda 2030 ha afectado a la auditoría de muchas maneras, ya que más de la mitad de las EFS utilizan los ODS para elegir los temas de auditoría y como criterios de auditoría. Sólo el 6% de los encuestados afirmó que la Agenda 2030 no había afectado en absoluto a sus actividades de auditoría.
Entre los ODS centrados en el medio ambiente, en 2018-2020 el ODS 6 (Garantizar la disponibilidad y la gestión sostenible del agua y el saneamiento para todos) fue el más auditado. En 2021-2023, el ODS 13 (Adoptar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos) será el tema más popular. A nivel regional, las EFS del Sur Global prestaron más atención a los ODS que las EFS del Norte Global.
Los problemas de datos son los mayores obstáculos
Según la encuesta, los obstáculos más comunes a la auditoría medioambiental están relacionados con los datos, ya sea la falta de ellos o las dificultades para acceder a datos fiables. Las EFS consideraron que los problemas relacionados con los datos eran mayores obstáculos que otras cuestiones, como la falta de experiencia.
El trabajo de oficina ha sustituido a las visitas sobre el terreno
El informe también ofrece una visión de las formas en que la pandemia ha afectado a la forma en que las EFS llevan a cabo las auditorías medioambientales. Aunque la capacidad de muchas EFS para continuar su trabajo a distancia es motivo de celebración, también existe una gran preocupación por la calidad de las auditorías realizadas sin visitas ni observaciones sobre el terreno. El mensaje de la comunidad de auditores medioambientales es claro: las observaciones físicas no pueden sustituirse únicamente por el trabajo de oficina.
Para el futuro, las EFS prevén más actividades centradas en los ODS, una mayor formación sobre auditoría medioambiental y cuestiones medioambientales, y un mayor intercambio de conocimientos con otras EFS.
La encuesta y la infografía están disponibles en el sitio web del GTAMA.